¿Resfriado o gripe?

Lo primero que debes tener presente para tratar el resfriado es que es una infección respiratoria que comparte ciertas características con la gripe pero son enfermedades diferentes.

La gripe causada por el virus de la influenza y es contagiosa. Los síntomas más comunes son: fiebre, dolor de cabeza, dolor de garganta y muscular, tos seca, debilidad y cansancio.

Por su parte, el resfriado común presenta síntomas como congestión y secreción nasal, estornudos, dolor de garganta, irritación ocular, fiebre y tos moderada.

El tratamiento de los síntomas no hará desaparecer el resfriado, pero te ayudará a sentirte mejor. Los antibióticos casi nunca se necesitan para tratar un resfriado común. El paracetamol (Tylenol) y el ibuprofeno (Advil, Motrin) ayudan a disminuir la fiebre y aliviar los dolores musculares.

La duración del resfriado suele ser de una semana, con un poco de tos por algunos días más. No olvides consultar a tu médico de familia ante cualquier síntoma adicional o complicación.

Los consejos de prevención son comunes a ambas enfermedades:

• Lleva una dieta variada y practica hábitos saludables: eso te ayudará a mantener un sistema inmune fuerte y no caerás ante el ataque de los virus.
• Mantente hidratado para tener las mucosas húmedas
• Lávate las manos con frecuencia, son una de las principales vías de contagio.
• Evita el contacto con personas que ya padecen la enfermedad.

• No compartas material de higiene personal (toallas, pañuelos, etc.), ni utensilios (cucharas, vasos, etc.)
• Usa pañuelos desechables.
• Vacúnate de la gripe si perteneces a un grupo de riesgo.

Hay que tener especial cuidado con la gripe ya que es más grave que el resfriado y puede tener complicaciones, como por ejemplo, la neumonía. Sobre todo hay que vigilar a las personas con enfermedades respiratorias o cardiovasculares (incluidos los niños), mayores de 60-65 años, mujeres embarazadas y, en general, personas con baja inmunidad o con enfermedades crónicas (diabetes, insuficiencia renal...).

Ten siempre en cuenta lo importante que es consultar con tu médico y que la automedicación puede conllevar consecuencias muy negativas para tu salud.